La lógica en la India by Vicente Fatone

La lógica en la India by Vicente Fatone

autor:Vicente Fatone [Fatone, Vicente]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Pensamiento religioso, Hinduismo, Budismo, Buddhismo, YQRN3, YQRN4
editor: Athenaica
publicado: 1944-10-15T06:00:00+00:00


5. Al proceder a la enumeración de las falacias, los Nyâyasûtras ya habían contemplado el problema particular de la legitimidad de negar lo que no se percibe cuando se dan las condiciones de su percepción. Se refieren a él por la importancia que su solución tenía para afirmar o negar la eternidad de la palabra, y no por un interés simplemente formal; la eternidad de la palabra no interesaba, a su vez, sino en cuanto permitía resolver el problema de la palabra contenida en los libros sagrados, que sólo siendo eterna y no contingente aseguraría la salvación a quienes a ella se atuviesen. La palabra, y, en general, el sonido, sostenían los naiyâyikas, no es eterna, entre otras razones porque no la percibimos antes que sea articulada y porque no percibimos obstáculo alguno que explique que no la percibamos (Nyâyasûtras, II, ii, 19.) A eso podía contestarse que si la existencia de la palabra antes de su articulación podía ser negada en razón de que no se la percibía, de la misma manera podía negarse, porque no se la percibía, esa no percepción; y, negada la no percepción del obstáculo, quedaba afirmado éste e invalidado el argumento por el cual se negaba eternidad a la palabra. Con el mismo derecho con que se niega el obstáculo porque no se lo percibe, se puede negar la no percepción del obstáculo, tampoco percibida; y, de igual manera, con el mismo derecho con que se afirma la no percepción, aunque no se la percibe, se podría afirmar el obstáculo, aunque no se lo perciba. Los naiyâyikas contestan, simplemente, que la no percepción no es sino ausencia de percepción (II, ii, 21) y repiten las mismas palabras al estudiar especialmente esa falacia (V, i, 30); pero en seguida, como reconociendo la dificultad del problema, invocan, para resolverla, la experiencia íntima en que el alma tiene conciencia de sus diversas formas de conocimiento: tanto de los que en ellas se dan y que se expresan con las palabras «sé esto, sé aquello...», como de los que en ella no se dan y que se expresan con las palabras «no sé esto, no sé aquello...». También de esa no percepción hay, pues, conocimiento. Pero este último recurso no es muy coherente con la posición general de los naiyâyikas, para quienes el medio de conocimiento que nos permite negar debe ser reducido simplemente a la inferencia.

El pasaje de los Nyâyasûtras en que se dice que la inexistencia o negación es un medio de conocimiento que puede reducirse a la inferencia, plantea un problema que no es el del juicio negativo, si bien parece ligado a él. Vâtsyâyana, al comentarlo, dice que mediante la negación de un hecho podemos inferir la afirmación de otro: la ausencia de lluvia, en presencia de nubes, permite inferir la presencia de altos vientos. Pero esto no demuestra, evidentemente, que la negación sea un medio de conocimiento con objeto propio; sólo demuestra que también el juicio negativo puede ser invocado como razón de un hecho.



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